El presidente está convencido de que se mantendrá en La Moncloa

Báñez, Ayllón y Nadal, los ministros que se propone nombrar Sáenz de Santamaría

La vicepresidenta ha reforzado su posición y vuelve a ser pieza clave en el Gobierno que ya está diseñando Rajoy

Álvaro Nadal, José Luis Ayllón y Fátima Báñez.
Álvaro Nadal, José Luis Ayllón y Fátima Báñez.

Mariano Rajoy está convencido de que seguirá siendo presidente del Gobierno. O bien logrando la investidura, o bien, si no lo consigue, después de esas terceras elecciones previstas para diciembre. Ya está manejando datos para configurar el nuevo Ejecutivo, y Soraya Sáenz de Santamaría mantiene todas sus opciones.

La posición de la vicepresidenta continúa siendo muy fuerte dentro del Gobierno, lo mismo que la confianza que el presidente tiene en ella. Una prueba más es que Rajoy le dio plenos poderes para diseñar y nombrar el equipo que negoció con Ciudadanos el actual pacto de investidura.

Con ese motivo, Sáenz de Santamaría aprovechó para colocar en primera línea a tres personas de su máxima confianza: Fátima Báñez, José Luis Ayllón y Álvaro Nadal, al mismo tiempo que dejaba fuera a personajes tan destacados como el ministro de Economía, Luis de Guindos.

Al mismo tiempo, sus principales “rivales” políticos, los integrantes del llamado G-8 (también denominados los “antisorayos”), se encuentran en baja, como consecuencia de movimientos recientes como la dimisión y salida de José Manuel Soria, el paso de Ana Pastor a la presidencia del Congreso y la pérdida de confianza de Rajoy en Arias Cañete e Isabel García Tejerina. De hecho, el único superviviente es Rafael Catalá, ministro de Justicia. Se mantiene relativamente José Manuel García-Margallo, pero su continuidad en el próximo Gabinete se ve cada vez más difícil.

Los ministros “de” Soraya

Aprovechando esa buena posición, la vicepresidenta se ha propuesto blindar la continuidad de Fátima Báñez, que veía peligrar su continuidad ante el proyecto de crear un “superministerio” de Economía para Luis de Guindos, que asumiría por tanto las competencias del Ministerio de Empleo y Seguridad Social.

Además, peleará por colocar a Álvaro Nadal al frente de Industria, una cartera importante a la que, sin embargo, quiere optar también María Dolores de Cospedal. En su caso, se da por descontado que abandonará la Secretaría General del Partido Popular en el próximo Congreso Nacional, y tiene el compromiso de Rajoy de nombrarla ministra.

En cuanto a José Luis Ayllón, durante las negociaciones con Ciudadanos se planteó la posibilidad de crear un órgano para controlar las tensiones territoriales, sobre todo con Cataluña. Si eso derivara finalmente en un ministerio, Sáenz de Santamaría quiere que sea el ministro, aunque en el equipo de Rajoy prefieren que continúe como secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, mucho más cuando previsiblemente la nueva legislatura resultará muy complicada debido a la fragmentación del Congreso.

 

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