Soluciones inmobiliarias ante el alto precio de la vivienda en Barcelona

Vista de Barcelona.
Vista de Barcelona.

Sigue aumentando el precio de la vivienda en España, especialmente en grandes urbes como Madrid o Barcelona. En la Ciudad Condal, de hecho, el repunte alcanza el 10% en el último año y no parece que la dinámica vaya a cambiar a corto plazo, por lo que tanto ofertantes como demandantes comienzan a vislumbrar alternativas en el mercado inmobiliario para poder contar con un hogar en la capital catalana sin que eso signifique su ruina económica, y todo ello hace que algunas inmobiliarias en Barcelona actualicen los precios a diario como se puede ver en el enlace anterior.

Estas son algunas de las soluciones inmobiliarias más factibles ante la realidad que vive Barcelona:

  1. Alquiler. Cuanto más crece el precio de la vivienda, mayor es el número de alquileres que se firman cada mes. La gente ni puede ni quiere pagar las cifras mareantes que se manejan hoy en día en la compraventa inmobiliaria y por ello acude al alquiler como la solución a su situación actual. Muchas parejas posponen la idea de matrimonio o de tener hijos ya que siguen viviendo en un piso alquilado, confiando en que en un futuro los precios de la vivienda vuelvan a bajar para poder iniciar su proyecto familiar en una casa propia. El problema de este fenómeno es que la demanda de pisos de alquiler sube, lo que provoca a su vez que los precios estén por las nubes y que la renta mensual alcance cifras muy elevadas.
  2. El extrarradio barcelonés. La primera corona de Barcelona o la zona de El Maresme son zonas alejadas del centro de la capital en las que tradicionalmente la gente de clase media evitaba vivir. Sin embargo, los precios en el extrarradio no tienen nada que ver con los del núcleo urbano barcelonés, y de hecho muchas veces estas cifras disminuyen hasta incluso la mitad. Así, una vivienda cuesta unos 4.500 euros por metro cuadrado en plena Ciudad condal, mientras que en el extrarradio este precio baja hasta los 3.000 euros. En lo que se refiere al alquiler, la diferencia es aún mayor y mientras que en el centro la renta puede alcanzar los 1.500 euros, en El Maresme difícilmente superan los 750.
  3. Masovería urbana. Esta iniciativa está teniendo mucho éxito en Barcelona y consiste en reformar una vivienda para poder vivir gratis en ella durante un tiempo determinado. La idea se basa en un antiguo sistema por el cual un señor feudal permitía a una familia vivir en sus tierras a cambio de que labrase los campos. El paso del tiempo ha madurado este sistema y actualmente muchas casas del centro de Barcelona necesitan reformas pero sus propietarios no tienen solvencia como para acometerla. Por ello, un inquilino que la renueve totalmente podría vivir en ella durante meses e incluso años, todo ello con un contrato de por medio.
  4. Actuación pública. Actualmente el parque de vivienda pública barcelonés abarca el 1% del total del mercado, por lo que las soluciones que podemos encontrar en esta bolsa son limitadas y además se encuentran especialmente indicadas para gente con pocos recursos ya que se considera una inversión social. Sin embargo, el Ayuntamiento va a intentar poner un límite al precio de los alquileres, lo que podría beneficiar a mucha gente que no puede pagar las cantidades que hoy en día se manejan.

 

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